Es una verdad incómoda, no sólo en Asturias sino en toda España. En muchas comunidades autónomas nos envidian y nos critican. La medida tiene detractores pero también defensores. Hay quien tilda las prejubilaciones como despidos encubiertos. En las cuencas, criticarlas te convierte automáticamente en un facha. Lo cierto es que cuando Hunosa, empresa estatal minera, comenzó a prejubilar trabajadores la idea era cerrar explotaciones mineras e iniciar un periodo de reindustrialización (reconversión minera) que nunca se llevó a efecto.
En todo caso, las prejubilaciones no han sido una medida exclusiva de Hunosa o Ensidesa. La banca, TVE y otras multinacionales se han acogido a esta medida para ajustar sus plantillas ante una época de vacas flacas.
Esta es la película de los hechos. O, al menos, una parte de ella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario