Cada uno en su campo, en su terreno, son dos personajes carismáticos. El joven es Hevia, el gaitero de Asturias; el mayor es Tano Muñiz, mierense, marqués de Lladreo, 85 "tacos" le contemplan y los lleva como un chaval. Los dos se encontraron allá por el mes de mayo en Santa Olaya de Cabranes, en la "XXVI edición de la fiesta del arroz con leche", y se dieron un abrazo mientras participaban en esa tradicional fiesta asturiana. Cuando hay voluntad -y salud- los años nunca son un inconveniente para disfrutar de la vida y de todas las cosas buenas que nos ofrece.
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