Luis Montes, ex coordinador de urgencias del Hospital Severo Ochoa, de Leganés, dio una conferencia ayer en Mieres auspiciada por Radio Parpayuela y que forma parte de un ambicioso programa elaborado por la emisora mierense y denominado "Espacio Cultural". El que fuera apodado "Doctor Muerte" y al que se le quisieron imputar 400 homicios por sedaciones ilegales, dejando maltrecha su reputacion, acudió a Mieres para presentar también su libro "El caso de Leganés", de reciente publicación. El debate sobre la eutanasia y el derecho a una muerte digna, controvertido y de hondo calado social, fue planteado abiertamente por el doctor Montes ante un auditorio repleto de público que siguió atentamente la exposición del experto. Lamentablemente, una buena parte de la opinión pública continúa confundiendo cuidados paliativos (una muerte digna, sin agonía, sufrimiento y dolor) con eutanasia, cuando nada tienen que ver una cosa con la otra.
El reciente caso de Eluana Englaro (sufrió un accidente de tráfico a los 21 años y ahora tenía 38), en Italia, una muchacha a la que se le retiró la alimentación por sentencia judicial después de 17 años en coma vegetativo, falleciendo poco después, ha reabierto la polémica. Cabe recordar en este sentido que en España la "Ley de autonomía del paciente", de 2002, consagra la libertad y el derecho del enfermo, o de su representante legal, a renunciar a cualquier tratamiento médico. En Asturias "Las instrucciones previas o testamento vital" es una figura legal que entró en vigor en mayo de 2008. La regulación del suicidio asistido o la eutanasia es un asunto espinoso que va a llevar tiempo y, seguramente, enconados debates, pero está claro que los enfermos terminales no quieren una muerte con dolor y sufrimiento, ni una vida sin vida.
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